El cambio climático es una realidad más que contrastada. Entre sus consecuencias, está el aumento del nivel del mar debido al deshielo de los polos. Un efecto que, sobre nuestras islas de Ibiza y Formentera, supondría el mayor cambio a todos los niveles desde su colonización por el hombre hace más de 4.000 años.
Amplias zonas de Vila, Sant Antoni, Sant Jordi y Platja d’en Bossa pasarán a estar bajo el agua en Ibiza, surgiendo dos nuevos islotes en las montañas de ses Salines. En Formentera, el cambio será más drástico aún, desapareciendo todo el norte de la isla: ses Illetes, es Trucadors, la Savina o casi todo s’Espalmador. Y todo ello en una fecha muy cercana, en unos 80 años.
Así lo asegura el Ministerio para la Transición Ecológica según las simulaciones realizadas teniendo en cuenta el mantenimiento de las emisiones actuales. Incluso cumpliendo el Acuerdo de París que limitaría el incremento de la temperatura global a final de siglo en tan solo 2 grados, esto supondría un aumento del nivel del mar de unos cinco metros. Y si tenemos en cuenta que es poco probable que dicho acuerdo se llegue a materializar, hablamos de que las islas sufrirán el mayor impacto en su forma y superficie desde la llegada del hombre a la Tierra.
Las consecuencias del cambio climático no solo afectarán en el mar, sino también en el clima. Las islas dejarán de tener las temperaturas cálidas actuales para pasar a tener veranos realmente calurosos y con un descenso de lluvias que afectará de manera importante a las plantaciones.
Es responsabilidad de todos actuar ahora para lograr un futuro mejor. Y no hablamos de un futuro lejano, sino de nuestro propio futuro y el de nuestros hijos.